La cinta dirigida por John Lee Hancock y con guión de Robert D. Siegel nos muestra el típico sueño americano de convertir un pequeño negocio local en la gallina de los huevos de oro no sin antes haber pasado por ciertos riesgos y pasar por el filo del desastre.
Y es que las historias de los grandes retos están llenas de oscuras propuestas o no tan limpias promesas o vaya usted a saber, pero en cualquier caso el imperio de las hamburguesas parece bastante suculenta de contar y es al menos entretenido de ver en la gran pantalla, aunque yo particularmente no las pruebo, salvo alguna vez las que compro en la carnicería, pero es que soy mas que clásico.
La película esta bien contada, con un Michael Keaton en muy buen estado, ya que hablamos de comida :-), Nick Offerman y John Carroll Lynch que hacen de hermanos McDonald también están interesantes, aunque lo chulo es ver como Ray Kroc (Michael Keaton) se apodera de un negocio tan sabroso.
Sin duda otro punto muy interesante de la cinta es la fotografía y la dirección de arte que te trasladan a esa América en la que comienza a despertar el Rock & Roll.
Nota: 6,5
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