Una madre supercalculadora tiene a su hija pequeña liada con un plan de estudios infernal para que entre en una academia, por ello se han trasladado a un nuevo barrio mas cómodo y tranquilo cerca de la nueva escuela, pero hay un vecino con un inquilino un tanto estrambótico que preocupa a la madre. Un viejo aviador, el cuál sin embargo agrada a la peque que se siente atraída por el simpático y extraño señor, éste le empieza a contar historias fantásticas de un sobré un principito, unos relatos que le llevarán al mundo de la fantasía donde lo esencial es invisible a los ojos...
Esta cinta dirigida por Mark Osborne es una película dentro de otra película, la archifamosa historia del principito, la novela de Antoine de Saint-Exupery, dentro de un relato mas extenso creado para un largometraje, escrito por la guionista Irena Brignull.
La música es responsabilidad de Richard Harvey, Hans Zimmer y cuenta con canciones de la cantante francesa pop francesa Camille. En la cinta salen también los personajes secundarios del cuento, no sólo el principito o el aviador.
La verdad es que la apuesta de Mark Osborne es valiente e inteligente, o eso creo, porque el relato de Saint-Exupery para un largo es complicado, diría yo. La apuesta de incluir esta historia, de la niña, en unos dibus típicos, en plan pixar y mezclarlos con partes del principito con la técnica del stop motion, dan un resultado potente y mágico.
Por otro lado creo que en el fondo tanto la niña como el principito acaban dándonos el mismo mensaje, el mensaje que doy al comienzo del post y con el que ademas no quiero dar mas pistas sobre una cinta que creo que es bastante buena, lo esencial es invisible a los ojos, ...aunque yo añadiría algo mas, si veís la peli tampoco está mal :-)
Nota 7.5
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